Coincidiendo con la pregunta ¿por qué la crítica de arte es tan aburrida? que pudimos comentarla, e incluso colgar el audio de una entrevista a Guillermo Solana. El artista visual Lalo Quiroz, hace una reflexión sobre el proyecto Arte y Activismo Cultural para Combatir el Estigma y la discriminación, recientemente inaugurado. Este texto pone en evidencia el escaso criterio de un par de “noveles críticos de arte”.
A continuación el texto de Lalo Quiroz.
CUANDO DOS "CRITICOS DE ARTE" CAGAN FUERA DEL BAÑO
Durante siglos, muchos han usado el poder de la palabra para causar efectos, muchas veces de consecuencias incomprensibles. Algunos han teñido la historia de genocidios y otros han llevado a miles de personas al suicidio colectivo, pero felizmente han existido otros que han hecho aportes positivos e incluso han generado la auto liberación de pueblos enteros. Esta capacidad, el dominio de la palabra oral o escrita, la desarrollan muy bien y casi magistralmente (además de actores y escritores), la mayoría de políticos, periodistas y comunicadores.
El viernes 26 de septiembre, se dio inicio al proyecto Arte y Activismo cultural para combatir el estigma y la discriminación, desarrollado por
Si bien es cierto, que el taller se desarrolló dentro de la tolerancia y cordialidad de los diversos participantes, expositores e incentivado por los mismos organizadores, se presenció una situación de intolerancia y estrechez de mente originada por uno de los invitados. Posiblemente la ingenuidad de los organizadores, al juntar perros, gatos y ratas; o tal vez la falta de experiencia en el manejo de estas dinámicas generó que se creara un estado de incomodidad y malestar entre la mayoría que asistimos y permanecimos durante todo el día. Lo cierto es que por unos minutos tuvimos que aguantar la arrogancia, malcriadez y falta de respeto de los señores “críticos de arte” Rafo León y sobre todo de Fernando Vivas, con sus comentarios fuera de lugar, tras la presentación de las experiencias artísticas de Susana Torres (Colectivo Sociedad Civil), Mar Pérez (Empleada Audaz) y de quien escribe.
Primero el señor León, nos ofreció reflexiones generales y solo se dedicó a divagar sobre lo expuesto sin ofrecer mayores aportes, para luego dar pase al señor Vivas, quién se fue con toda su verbosidad, como debe ser un “buen crítico de arte”, polarizándose abruptamente, ensalzando y desmereciendo según sus propios intereses a quién mas le pareció. En este caso, el principal blanco de los ataques biliosos del señor Vivas fue la presentación de mi proyecto Se vende o alquila este local, diciendo todo lo que se le pego en gana, sin ningún tipo de argumentos sólidos y demostrando que simplemente no había entendido nada; lo cual me tiene sin cuidado porque nunca me ha interesado, ni muchos menos he trabajado para la crítica; pero eso no fue lo grave, sino su completa irresponsabilidad y falta de respeto al terminar de lanzar sus incongruencias, pararse y decir que lamentablemente se tenía que retirar, dejando a un auditorio con toda la intención de cuestionarlo. Finalmente, este señor, quien seguramente pensó que había entrado a un baño público, aprovechó la casi nula reacción de todos nosotros y de la misma organización, para irse embarrado, sin limpiarse y diciendo que cualquier comentario lo hagamos a su correo electrónico. Completamente inadmisible.
Mientras tanto, el desorden en la participación del público y las ideas fue aprovechado por el señor León para intentar llevar la discusión hacia un problema muy grave como el de Majaz, pero que no tenía nada que ver con lo que estábamos discutiendo, demostrando su poco interés y respeto por los lineamientos del taller. En ese desorden, él SÍ se limpió y se retiro.
Este tipo de situaciones no se pueden permitir. Bienvenida la crítica pero con argumentos serios y responsabilidad, participemos en espacios de discusión pero con tolerancia y respeto; este tipo de periodistas hacen un daño tremendo y no contribuyen a un desarrollo pluralista y diverso en nuestra sociedad, son concientes del poder que tienen en lo mediático y lo usan indiscriminadamente. Pero, felizmente el espacio mediático se expande cada vez más con la red, dándonos la oportunidad de contar con un medio más democrático y de verdadera libertad de expresión.
No dejemos que ciertos “críticos de arte” monopolicen y manipulen con sus criterios lo que verdaderamente representa el arte en el país, hace mucho tiempo que vienen creando mitos y leyendas alrededor de artistas que ni ellos mismos saben que decir sobre sus propuestas, confío en que las nuevas generaciones de críticos lograrán ampliar esta micro escena artística y al mismo tiempo des-elitizarla, mientras tanto, los que podamos hacerlo, no nos quedaremos callados.
Lima, septiembre, 2007.